"EN ESPAÑA SE INVIERTE EN TRENES LO QUE SE RECORTA EN SANIDAD"
Die Welt es un periódico germano perteneciente al poderosísimo grupo
Axel Springer, una sociedad de línea ideológica extremadamente
conservadora. Tiene una tirada aproximada de 209.000 ejemplares
diarios, vendiéndose en más de 130 países.
Pues
bien, a principios de esta semana, el diario alemán calificaba de
"delirio español por la alta velocidad" la obsesión de no pocos
políticos hispanos por la velocidad. En un artículo firmado por su
corresponsal en España, Üte Müller, se ponía de manifiesto la
contradicción existente entre la política de recortes y de subida de
impuestos que aplica el gobierno de Rajoy y la inversión de cantidades
ingentes en la red ferroviaria. "Para la red ferroviaria sigue habiendo
dinero en España", ironizaba el autor de la crónica.
En
su artículo, Üte Müller resaltaba cómo el último tramo inaugurado en
España, el de Madrid-Alicante, ha costado la friolera de 2.000 millones,
"la misma suma que planea recortar el gobierno en los próximos dos años
en el sector de la Sanidad".
"El viaje inaugural de la
nueva línea ferroviaria de alta velocidad - escribía Üte Müller en Die
Welt - transcurrió sin problemas, al menos hasta Alicante. Pero
entonces, a su llegada, los ilustres viajeros y los periodistas que les
acompañaban se vieron confrontados con la dura realidad de la Península
Ibérica: Los manifestantes indignados les recibieron con pitidos. Y en
la nueva estación los viajantes se las tuvieron que apañar para acceder a
sus trenes por tablas provisionales, puesto que el edificio aún no está
del todo acabado. Rajoy intentó ocultar todo esto con una sonrisa y
elogió su propia política"
"En efecto, -
continúa diciendo el rotativo alemán - la nueva línea ferroviaria, un
tramo de 169 kilómetros que une Cuenca con la ciudad costera de
Alicante, ha costado 2.000 millones de euros. Esta misma suma planea
ahorrarla el gobierno en los próximos dos años en el sector de la
sanidad. El delirio de la alta velocidad comenzó hace ya 21 años, cuando
se inauguró la primera línea de AVE entre Madrid y Sevilla. Con el
apoyo de fondos comunitarios, los españoles disponen entretanto de una
red ferroviaria de 3.000 kilómetros de alta velocidad. Tan solo China
cuenta con una red más extensa que la española - pero también con un
número de habitantes 26 veces mayor."
"En los
últimos años - enfatizaba Müller - la construcción de esta red
ferroviaria les ha costado a los españoles más de 40.000 millones de
euros. Se han construido 28 nuevas estaciones y se ha adquirido una
flota de 130 trenes. No obstante, la demanda ha quedado muy por debajo
de lo esperado. Según el periódico español El Mundo, sobran como mínimo
el 15% de los trenes, con un precio de catálogo de 750 millones. Hace ya
tiempo que las líneas de alta velocidad se convirtieron en una trampa
de deudas. Las obligaciones del consorcio ferrovial estatal Renfe
ascienden a 20.000 millones de euros."

LOS TRENES CANARIOS
¿Se imaginan nuestros lectores lo que podría decir el periódico
germano si estuviera al corriente de los proyectos ferroviarios que se
pretenden ejecutar en las islas de Tenerife y Gran Canaria que tendrán
un costo de 6.400 millones de euros?
Pero un dato
abracadabrante que le retorcería los mismísimos tuétanos al corresponsal
alemán es que sin haberse iniciado aun la ejecución de estas
fantasmales iniciativas ferroviarias ya se han gastado la nada
despreciable cifra de 40 millones de euros, o sea, dicho en plata, más
de 6.655 millones de las antiguas pesetas. ¿Cómo es posible que una
sociedad como la canaria, con más del 30% de su fuerza laboral en paro,
consienta un desatino de tamaña envergadura? ¿Dónde están sus
organizaciones políticas y sindicales que no informan a la ciudadanía
sobre el descabellado proyecto? La respuesta se la dejamos a nuestros
lectores
"EN ESPAÑA SE INVIERTE EN TRENES LO QUE SE RECORTA EN SANIDAD"
Die Welt es un periódico germano perteneciente al poderosísimo grupo Axel Springer, una sociedad de línea ideológica extremadamente conservadora. Tiene una tirada aproximada de 209.000 ejemplares diarios, vendiéndose en más de 130 países.
Pues bien, a principios de esta semana, el diario alemán calificaba de "delirio español por la alta velocidad" la obsesión de no pocos políticos hispanos por la velocidad. En un artículo firmado por su corresponsal en España, Üte Müller, se ponía de manifiesto la contradicción existente entre la política de recortes y de subida de impuestos que aplica el gobierno de Rajoy y la inversión de cantidades ingentes en la red ferroviaria. "Para la red ferroviaria sigue habiendo dinero en España", ironizaba el autor de la crónica.
En su artículo, Üte Müller resaltaba cómo el último tramo inaugurado en España, el de Madrid-Alicante, ha costado la friolera de 2.000 millones, "la misma suma que planea recortar el gobierno en los próximos dos años en el sector de la Sanidad".
"El viaje inaugural de la nueva línea ferroviaria de alta velocidad - escribía Üte Müller en Die Welt - transcurrió sin problemas, al menos hasta Alicante. Pero entonces, a su llegada, los ilustres viajeros y los periodistas que les acompañaban se vieron confrontados con la dura realidad de la Península Ibérica: Los manifestantes indignados les recibieron con pitidos. Y en la nueva estación los viajantes se las tuvieron que apañar para acceder a sus trenes por tablas provisionales, puesto que el edificio aún no está del todo acabado. Rajoy intentó ocultar todo esto con una sonrisa y elogió su propia política"
"En efecto, - continúa diciendo el rotativo alemán - la nueva línea ferroviaria, un tramo de 169 kilómetros que une Cuenca con la ciudad costera de Alicante, ha costado 2.000 millones de euros. Esta misma suma planea ahorrarla el gobierno en los próximos dos años en el sector de la sanidad. El delirio de la alta velocidad comenzó hace ya 21 años, cuando se inauguró la primera línea de AVE entre Madrid y Sevilla. Con el apoyo de fondos comunitarios, los españoles disponen entretanto de una red ferroviaria de 3.000 kilómetros de alta velocidad. Tan solo China cuenta con una red más extensa que la española - pero también con un número de habitantes 26 veces mayor."
"En los últimos años - enfatizaba Müller - la construcción de esta red ferroviaria les ha costado a los españoles más de 40.000 millones de euros. Se han construido 28 nuevas estaciones y se ha adquirido una flota de 130 trenes. No obstante, la demanda ha quedado muy por debajo de lo esperado. Según el periódico español El Mundo, sobran como mínimo el 15% de los trenes, con un precio de catálogo de 750 millones. Hace ya tiempo que las líneas de alta velocidad se convirtieron en una trampa de deudas. Las obligaciones del consorcio ferrovial estatal Renfe ascienden a 20.000 millones de euros."

LOS TRENES CANARIOS
¿Se imaginan nuestros lectores lo que podría decir el periódico germano si estuviera al corriente de los proyectos ferroviarios que se pretenden ejecutar en las islas de Tenerife y Gran Canaria que tendrán un costo de 6.400 millones de euros?
Pero un dato abracadabrante que le retorcería los mismísimos tuétanos al corresponsal alemán es que sin haberse iniciado aun la ejecución de estas fantasmales iniciativas ferroviarias ya se han gastado la nada despreciable cifra de 40 millones de euros, o sea, dicho en plata, más de 6.655 millones de las antiguas pesetas. ¿Cómo es posible que una sociedad como la canaria, con más del 30% de su fuerza laboral en paro, consienta un desatino de tamaña envergadura? ¿Dónde están sus organizaciones políticas y sindicales que no informan a la ciudadanía sobre el descabellado proyecto? La respuesta se la dejamos a nuestros lectores
Die Welt es un periódico germano perteneciente al poderosísimo grupo Axel Springer, una sociedad de línea ideológica extremadamente conservadora. Tiene una tirada aproximada de 209.000 ejemplares diarios, vendiéndose en más de 130 países.
Pues bien, a principios de esta semana, el diario alemán calificaba de "delirio español por la alta velocidad" la obsesión de no pocos políticos hispanos por la velocidad. En un artículo firmado por su corresponsal en España, Üte Müller, se ponía de manifiesto la contradicción existente entre la política de recortes y de subida de impuestos que aplica el gobierno de Rajoy y la inversión de cantidades ingentes en la red ferroviaria. "Para la red ferroviaria sigue habiendo dinero en España", ironizaba el autor de la crónica.
En su artículo, Üte Müller resaltaba cómo el último tramo inaugurado en España, el de Madrid-Alicante, ha costado la friolera de 2.000 millones, "la misma suma que planea recortar el gobierno en los próximos dos años en el sector de la Sanidad".
"El viaje inaugural de la nueva línea ferroviaria de alta velocidad - escribía Üte Müller en Die Welt - transcurrió sin problemas, al menos hasta Alicante. Pero entonces, a su llegada, los ilustres viajeros y los periodistas que les acompañaban se vieron confrontados con la dura realidad de la Península Ibérica: Los manifestantes indignados les recibieron con pitidos. Y en la nueva estación los viajantes se las tuvieron que apañar para acceder a sus trenes por tablas provisionales, puesto que el edificio aún no está del todo acabado. Rajoy intentó ocultar todo esto con una sonrisa y elogió su propia política"
"En efecto, - continúa diciendo el rotativo alemán - la nueva línea ferroviaria, un tramo de 169 kilómetros que une Cuenca con la ciudad costera de Alicante, ha costado 2.000 millones de euros. Esta misma suma planea ahorrarla el gobierno en los próximos dos años en el sector de la sanidad. El delirio de la alta velocidad comenzó hace ya 21 años, cuando se inauguró la primera línea de AVE entre Madrid y Sevilla. Con el apoyo de fondos comunitarios, los españoles disponen entretanto de una red ferroviaria de 3.000 kilómetros de alta velocidad. Tan solo China cuenta con una red más extensa que la española - pero también con un número de habitantes 26 veces mayor."
"En los últimos años - enfatizaba Müller - la construcción de esta red ferroviaria les ha costado a los españoles más de 40.000 millones de euros. Se han construido 28 nuevas estaciones y se ha adquirido una flota de 130 trenes. No obstante, la demanda ha quedado muy por debajo de lo esperado. Según el periódico español El Mundo, sobran como mínimo el 15% de los trenes, con un precio de catálogo de 750 millones. Hace ya tiempo que las líneas de alta velocidad se convirtieron en una trampa de deudas. Las obligaciones del consorcio ferrovial estatal Renfe ascienden a 20.000 millones de euros."

LOS TRENES CANARIOS
¿Se imaginan nuestros lectores lo que podría decir el periódico germano si estuviera al corriente de los proyectos ferroviarios que se pretenden ejecutar en las islas de Tenerife y Gran Canaria que tendrán un costo de 6.400 millones de euros?
Pero un dato abracadabrante que le retorcería los mismísimos tuétanos al corresponsal alemán es que sin haberse iniciado aun la ejecución de estas fantasmales iniciativas ferroviarias ya se han gastado la nada despreciable cifra de 40 millones de euros, o sea, dicho en plata, más de 6.655 millones de las antiguas pesetas. ¿Cómo es posible que una sociedad como la canaria, con más del 30% de su fuerza laboral en paro, consienta un desatino de tamaña envergadura? ¿Dónde están sus organizaciones políticas y sindicales que no informan a la ciudadanía sobre el descabellado proyecto? La respuesta se la dejamos a nuestros lectores
No hay comentarios:
Publicar un comentario